Papá Noel anda en búfala y viene de Las Flores, provincia de Buenos Aires. O eso nos gustó creer cuando recibimos una caja de productos de lácteos La Delfina.
Se trata de una empresa que ofrece productos lácteos elaborados con leche de búfala A2, sin conservantes, libres de gluten y 100% naturales. Tienen una amplia red de puntos de venta en CABA y alrededores, y algunos puntos de la provincia de Buenos Aires pero, si después de esta recomendación vas a querer probar y no estás cerca de ninguno de estos lugares, agarrás y te metés en el shop online y hacés desastres con la tarjeta.
La lista de productos de Leche de búfala de La Delfina es amplia: Variedad de quesos, yogures naturales, endulzados y con frutas y, lo más importante, dulce de leche de búfala. Debemos reconocer que lejos de discriminar nuestra especialidad y, para ampliar nuestros horizontes lácteos, no sólo hemos recibido el Dulce, sino que nos han enviado una selección de quesos y yogures.
Las características nutricionales de los productos elaborados a base de esta leche son diferentes a las de la leche de vaca, “cuenta con un nivel de calcio mucho más alto (…). Es baja en colesterol, tiene un alto contenido de antioxidantes naturales (tocoferoles y peroxidasas) y es rica en omega 3, magnesio y fósforo”, de acuerdo a la información que nos brinda la marca.
Si bien ya habíamos probado dulce de leche de búfala en alguna otra oportunidad La Delfina nos sorprendió con un producto de calidad premium “Elaborado con leche de búfala del día, recién ordeñada y azúcar orgánica”. Como lo describe el web site de la marca. Su textura es suave y cremosa, de color caramelo claro y con mucho brillo. Es un dulce que nos recuerda a los dulces de antes, no empalaga y, por su amabilidad y sabor únicos, tranquilamente puede ser un postre en sí mismo (al menos así lo consumimos nosotros).
Aprovechamos para contarles que los yogures de La Delfina también son exquisitos. La versión con colchón de frutas es excepcional y la versión “natural” es ideal para acompañar con granolas, frutas frescas y/o miel. Con el yogur natural batido hicimos esta torta de limón que rellenamos con el mismo producto endulzado con leche condensada y saborizado con ralladura de naranjas.
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